Aracena

Ciudades del Ibérico

Es el Castillo de Aracena el que preside la población, un recinto fortificado con raíces Almohades, que hace de atalaya en toda la serranía.

Es a los pies de la Muralla donde se levanta la iglesia del castillo, una soberbia construcción entre el mudéjar y el gótico que da asilo a la patrona de la villa, Nuestra Señora del Mayor Dolor.

Desde la bonita Espadaña y mirador del castillo, Aracena se abre como un pequeño nacimiento de casas blancas, un casco antiguo declarado, Bien de Interés Cultural que atesora no solamente el encanto de sus calles, sino también un rosario de iglesias y casa señoriales, recoletas plazas y un reguero de fuentes y lavaderos que adornan la población.

Visita obligada es la Gruta de las Maravillas, un tesoro geológico, un capricho de la naturaleza que se abre en un complejo sistema de galerías subterráneas, un escenario de lagos y estalagmitas, columnas de agua y piedra que se convierte en barco insignia de la población.

Aracena también es naturaleza, un horizonte abierto de campos adehesados qué dan forma al Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche.

Un escenario donde se cría el cerdo Ibérico protagonista del Museo del Jamón y la Feria del Jamón y el Cerdo Ibérico y también de la Semana del Jamón, certámenes gastronómicos que animan y dinamizan el turismo de la Villa de Aracena.

Otras ciudades del ibérico

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Configurar y más información
Privacidad